En esta última clase vamos a ver por qué es importante contemplar al equilibrio como un estado temporal y no como un punto de llegada permanente al que debemos aspirar. También veremos por qué el desequilibrio no es malo de por sí, aunque así lo tengamos visto socialmente. Por último pero no menos importante, pasaremos en limpio tus rutinas y rituales diarios y las herramientas que más te resultan en el corto plazo para poder aprovechar en esos famosos días exigentes. En el anteúltimo tema de esta clase encontrarás los recursos extras para inspirarte y aprovechar otras maneras de llevarte a la calma.