Estamos en el momento del año en el que nos replanteamos un sinfín de cosas y estamos a tope de compromisos y pendientes. Abrumador. Un ejercicio sencillo para crear un pequeño oasis de paz en medio del turbulento Diciembre
Un fin convoca un nuevo inicio y para muchas personas es normal sentirse estresadas y agotadas en este momento del año. Hace un tiempo ya no vivo más estas fechas así pero sé que si estás acá es posible que las vivas así y querés dejar de hacerlo.
🏹Te propongo algo simple: creá un momento durante el mes para estar a solas, unos minutos nada más. Sin celular pero también sin meditar o hacer yoga o sahumar nada. Solo estar. Cerrar los ojos, mirar la nada. Tirarse en el pasto, en el sillón, solo siguiendo el ritmo de la respiración, escuchando los latidos del cuerpo. Dejar pasar la catarata de pensamientos como ver pasar un tren sin subirte a ningún vagón, dejalo ir.
Es un momento donde puede salir la voz del ego a pelearse con la del corazón, recordá la imagen de ver el tren sin subirte a ningún vagón. Observá, nada más.
Muchas veces lo que nos demandamos no haber hecho a esta altura del año tiene que ver con “lo que tendríamos que haber hecho” y no con lo que queríamos hacer.
Este instante es único, es nuestro, somos en este instante, honrarlo es honrarte.